Han transcurrido dos meses desde la posesión del señor Iván Duque como presidente de la República de Colombia. A continuación, mis apreciaciones de lo que he visto hasta ahora en fotos.
El presidente y algunos de sus ministros, cuando suena el himno nacional, se ponen la mano en el pecho, gesto propio de los estadounidenses cuando escuchan su himno y del expresidente Uribe. El decreto 1967 de 1991 en su artículo 11, dice: “Cuando suenen los acordes del Himno Nacional todos los presentes deben ponerse de pie. Los varones se descubrirán la cabeza; hombres y mujeres interrumpirán cualquier actividad que están desarrollando y soltarán los brazos para adoptar una postura de respeto y veneración”. Entonces: aplicar la norma o seguir copiando.
El presidente lleva camisas como soporte de publicidad de gobierno, solo en las reuniones con el pueblo; nunca en la Casa de Nariño. Esta moda viene desde hace ocho años. No es lo adecuado, son cosas de publicistas.
En la bandera de Twitter todavía está la fotografía del día de su posesión en la que aparece con su familia. Muy linda la foto, pero no es la adecuada para una red social considerando que es de la presidencia de la República y que no tenemos monarquía. Vendría bien una imagen del presidente de los colombianos, no del esposo y padre de familia.
Me complace saber que el fotógrafo de la Casa de Nariño haya tenido en cuenta hacer las tomas de algunos de los ministros sin la bandera de guerra como fondo, como se usó al comienzo del gobierno pasado y como sí la tiene la ministro del Trabajo.
El ministerio de Justicia y del Derecho con bandera de guerra y en el círculo rojo, frase alusiva al ministerio como si fuese “Unidad” del Ejército. Esperamos que le quiten el escudo o la cambien.
En los dos o tres primeros talleres de Construyendo País, las mesas se adornaron así, con tapas color naranja puestas como para mesa de restaurante. Más que un tema de protocolo, es de estética. Por fortuna, en el taller de hoy 6 de octubre, ya la mesa de honor y las mesas de trabajo de los ministros, lucen con las tapas o sobre manteles discretos en su forma.
¡Al menos! Algo es algo.
El presidente Duque estuvo en Buga en la rogativa del llamado Señor de los Milagros o Milagroso de Buga, que la hacen cada siete años. Según he sabido, los encargados de la seguridad del presidente, reservaron dos filas de las bancas de la Basílica, la segunda de las cuales estaba ocupada por la gobernadora del Valle a la que hicieron pasar más atrás, y luego ocupada por personas a las que no les correspondía la banca o dicha ubicación. ¿No sabían cuántas personas hacían parte de la comitiva presidencial?
La comunidad quería entrar a la iglesia para participar del oficio religioso y no le fue posible porque cerraron las puertas debido a la presencia del mandatario de los colombianos en ese momento.
Según la foto, más parece una visita de la familia a la romería en mención. Es decir, el señor Iván Duque fue con su esposa y sus hijos a participar del oficio religioso como católico, como se ve en otras tomas. En tal sentido, las fotos no tenían por qué publicarse en la página web de la presidencia de la República que pagamos todos los colombianos.
Este fue el tuit que escribió uno de los asesores que estaba con la gobernadora del Valle, para conocimiento de ustedes.