Placas testimoniales
En días pasados estuve de vacaciones en Boyacá y Zipaquirá. Entre tantos paisajes y monumentos hermosos e interesantes, me puse en la tarea de tomar fotografías de las placas testimoniales de las efemérides alusivas a la Batalla de Boyacá, y distintivas de dependencias oficiales, con el fin de hacer los respectivos comentarios.
En Zipaquirá
Con el escudo de Zipaquirá era suficiente. No había necesidad de agregarle el logosímbolo o marca gobierno (2008-2011). Cuestión de ego. Tampoco entrecomillar la frase.
Esta placa indicativa de dicha secretaría, tiene el escudo de Zipaquirá y el logosímbolo del gobierno que acaba de pasar. De nuevo, el ego. El gobierno actual tendrá qué retirar la placa de piedra para reemplazarla por otra; lo más probable con la marca gobierno que determine el alcalde para continuar con la moda. Esto significa detrimento patrimonial.
Esta placa sí reúne las condiciones para quedarse donde está porque no tiene logosímbolo o marca gobierno. Significará un ahorro.
De nuevo, el ego. El logosímbolo de un período gubernamental o marca de gobierno, como le dicen. Les cito el decrto 1678 de 1958, artículo 5: “…igualmente prohíbese la colocación de placas, o leyendas, o la erección de monumentos destinados a recordar la participación de los funcionarios en ejercicio en la construcción de obras públicas, a menos que así lo disponga una ley del congreso”.
En el Puente de Boyacá
Muy bien porque el escudo de Colombia aparece solo, sin la famosa marca gobierno a que nos están acostumbrando los mandatarios. Gacias por el respeto. Creo que la palabra República va con mayúscula inicial porque hace referencia a un periodo de la historia. En cuanto al presidente y la vicepresidente, primero el cargo y después el nombre, aunque es opcional.
Aquí, la marca gobierno para que pase a la historia. Recuerden: primero el cargo y luego el nombre (opcional)
Era suficiente con el nombre del Comité 180 años. Sobraba el nombre del presidente y más con el “Dr.”.
En Paipa
Aunque no es una placa en piedra, mármol o metal, sino un pendón efímero en lona, vale la pena decir que era suficiente con decir que el pueblo de Boyacá le rendía tributo. Sobra el nombre del gobernador.
Hay algo que no cuadra en esta placa. ¿Quién agradece la pavimentación? Si es el pueblo de Paipa, la placa no tendría por qué llevar los escudos de Boyacá y de Paipa. Es como uno mismo agradecerse algo.
En fin, a la hora de redactar placas testimoniales, que en el comité encargado, haya un conocedor del protocolo.