El maestro Omar Rayo, conocido pintor, natural de Roldanillo, falleció la semana pasada.
Como es apenas lógico, la velación se llevó a cabo en el Museo Rayo de Roldanillo y las exequias en la parroquia.
Me cuentan que algunos Decretos gubernamentales iban a ser leídos en la Santa Eucaristía, pero el sacerdote que la oficiaba, no lo permitió.
Estoy totalmente de acuerdo con el sacerdote. Los templos están hechos para orar a Dios y no para leer actos administrativos de duelo. Ellos debieron ser leídos en el Museo, antes de salir con destino a la parroquia.
He allí el quid del asunto: se maneja protocolo por costumbre o porque así se ha hecho toda la vida, sin pensar en otros aspectos.